Avioncitos de papel

Esta anécdota me paso estando en el colegio (épocas aquellas), para ser mas exactos, en 4º de secundaria. Estábamos en la clase de Biología (con la miss Tessy) y yo estaba sentado en la parte de atrás en el medio y unos amigos estaban que se tiraban papelitos. En eso a un amigo se le ocurre hacer avioncitos y tirarlos. Para qué hizo eso. Todo el salón comenzó a hacer avioncitos, y como la miss Tessy estaba escribiendo en la pizarra no veía nada. De pronto un avión me cayo en la cara, me lo habían tirado desde la parte de adelante. Yo, queriendo cobrar venganza, arme un avión mucho más grande y fuerte. Espere un rato que la profesora se vuelva a voltear, y listo. Lo tire, con una sed de venganza increíble. Para mi mala suerte, a la persona que se lo tire, se agacho a sacar un cuaderno, justo en el mismo momento que se estaba acercando a la cabeza de mi amigo. El avioncito hizo una pirueta increíble, bajo subió y siguió de largo, hasta donde estaba la profesora. Si exacto, estaba yendo hacia la profesora, y para mi mala suerte (peor aún) la profesora volteo, y el avioncito se quedo clavado en su frente. Fue en ese momento que hubo un silencio increíble, seguido de risas entrecortadas. A mi me llevaron a dirección para explicar mi comportamiento y todo eso. Pero eso ya es otra historia xD

¿A quién miran?

La siguiente anécdota le sucedió hace un par de veranos a la amiga de mi amiga, mientras estaba en la playa. Ella estaba tomando sol hasta que le dieron ganas de darse un chapuzón. Le dijo a mi amiga para ir, porque no quería ir sola, a lo cual ella acepto. Una vez en el agua, decidió entrar un poco más para poder nadar y en eso viene una ola medianamente grande y la revuelca. Felizmente solo la asusto un poco, entonces ella decidió salir, y en eso que está saliendo se da cuenta que habían tres chicos (de unos 15 a 16 años aproximadamente) mirándola con la boca abierta. Ella, sorprendida en primer momento, no les dio importancia, pero como seguían mirando, miro atrás para ver que había pasado y, cuando volteo, se dio con la sorpresa que la parte de arriba del bikini estaba flotando bien campante. ESTABA CON TODO AL AIRE, Y LOS CHICOS ESTABAN ASI PORQUE LA ESTABAN MIRANDO!!!!! Lo único que hizo después de eso fue taparse y ponerse roja, recoger su bikini y echarse con la cara tapada durante el resto del día.

¡Ya no aguanto más!

Esta anécdota me pasó cuando tenía cerca de unos 12 años. Eran dos días antes del día del padre. Mis hermanas me habían ido a recoger de mi entrenamiento de básquet del colegio, así que estaba en buzo. Habíamos quedado en ir a comprar juntas el regalo para mi papá, obviamente tres chibolas no tenían mucho dinero para gastar, así que nos fuimos al mercado de magdalena a comprarle algo barato y bonito.
Buscamos el regalo cerca de media hora. Es en ese momento que, caminando por las calles me dieron ganas de ir al baño pero “URGENTE”. Mis hermanas me ofrecieron pagarme un baño de alguna tienda (esos que cuestan 50 céntimos). Pero yo, toda chica “eticosa”, preferí no aceptar su oferta ya que me parecía que esos baños eran sucios y olían horrible. Así que decidí aguantarme hasta llegar a la casa.
Poco a poco ya no soportaba las ganas y le dije a mi hermana: compra lo primero que veas porque ya no me aguanto. Nos paramos en la puerta de una galería (esas que son de un piso y que tiene tiendas a partir de la entrada). Habíamos caminado cerca de 35 minutos para decidirnos por una taza, ¡Tanto camino por una taza, tanto aguante por una taza! Yo ya no me podía aguantar las ganas de ir al baño, cuando en ese momento empecé a sentirme más relajada y también un poco mojada. ¡Me mojé los pantalones y lo peor es que no fue un poquito sino que fue demasiado parecía que me había tomado un bidón de agua! Al frente estaban las señoras de la tienda mirándome. Volteé a ver a mi hermana y le dije: Oh! Oh!, ella volteó a verme y grito ¡Te orinaste!, (claro para que todo el mundo se entere). Salió mi otra hermana y se empezó a matar de la risa. En ese momento me dio tanta vergüenza y me arrepentí tanto no haber aceptado la oferta de ir a esos baños de 50 céntimos.
Mis hermanas me siguen fastidiando hasta hora con eso, con que yo de 12 (no de 3 o 5 años sino de 12 años) me haya orinado en mis pantalones.
Moraleja: Si tienes ganas de ir al baño no te aguantes ya que hay momentos en donde la naturaleza nos gana, ve a buscar un baño. No hay que ser exigente con el baño que se va a usar porque si es urgente te puede pasar lo mismo que me pasó a mí.

Lornasas en febrero...

Una vez en febrero, ya hace algunos años, una amiga vino a mi casa para que la acompañara a su primera “cita romántica” porque le daba roche ir sola (ustedes comprenderán pues, teníamos solo 13 años u.u), y ya bueno, me pidió – por no decir rogar- que por favor la acompañara por lo menos hasta llegar allá para que se le quiten los nervios y esté más relajada. Entonces, yo -como buena amiga :D- acepté, y como quedaba masomenos cerca de mi casa, le dije para ir mejor caminando, de paso que nos poníamos a chismosear y se le iba el nerviosismo. Recordándolo, ahora me doy cuenta que fui una lornasa porque cómo se me ocurrió ir caminando en plena tarde de febrero, ¡un sábado para colmo! bueno en fin, sigo con la historia. Estábamos ahí caminando de lo más tranquilas, me acuerdo que yo le estaba contando que me había peleado con una chica del salón porque se había comprado mi misma falda apropósito y bla bla bla, en fin, cosas de chibolas; hasta que de repente! Se escuchó un AGUAAAAAAAAAAA!! MOJEENLAAAS!! Mi amiga y yo volteamos así todas asustada y lo que vimos fue un batallón, porque eso fue lo que era, un batallón de chibolos con 20 mil globos y baldes de agua corriendo hacia nosotras como si fuéramos el pozo de la tinka. Empezamos a correr así como nunca, pero para mala suerte, mi amiga justo ese día se había puesto unos tacos pequeños para su cita, y ya se imaginarán! Cuando me volteé a buscarla para ver porque no estaba corriendo a mi costado, la vi rodeada de todos los chibolos que empezaron a mojarla sin piedad. La pobre acabó totalmente empapada, su pequeño peinado que se había hecho y el maquillaje que tenía se fueron literalmente, al agua, y lo peor, es que todo eso pasó en la cara del chico con el que se iba a encontrar, que estaba justo con su mama comprándole una cajita de chocolates en una tienda cerca de donde estábamos. Lo único que pudo hacer mi amiga, después de que la ayudara a levantarse, y de también gritarle de todo a los chibolos, fue matarse de la risa junto conmigo porque sabía que había pasado el roche de su vida!

¡Una historia de homónimos!

Hace muchos años, cuando mi mamá ayudaba a mi hermano a estudiar ciencias históricas sociales. Le pregunta:
- ¿cuáles fueron los tres socios de la conquista?
Y mi hermano muy audaz , responde:
- Diego de Almagro…, Hernando de Luque… y … no sé.
Mi madre sorprendida porque mi hermano se había olvidado del más conocido, le dice:
- ¡Hay hijito! ¿Cómo se llama el más famoso?
- No lo sé, no me acuerdo - respondió.
- Es Francisco Pizarro - dijo mi mamá sorprendida.
-¡No, mamá!, ese es el arquero de la Alianza (1994-1997)- dijo muy conocedor mi hermano.
Y mi madre hecho a reir... Por supuesto que se pregunto si el colegio al que iba mi hermano era bueno o era un lapsus de sus cortos años.
Lo que es pertenecer a dos mundos diferentes o a dos generaciones.

Nota: Esta historia la cuento, ya que debido a los comentarios que realizo en mi casa esporádicamente a la hora de almuerzo o cena … Mi linda madre empieza a contar anécdotas de sus 3 hijitos. Mi hermano me ha prohibido rotundamente que la publique… pero hay que tener correo si o si.

Esta si dolió

El siguiente relato es uno de aquellos que realmente te deja marcado de por vida. Como casi todas las historias que he redactado, tenía alrededor de 12 años y ya iba por los 13 pues yo cumplo en Noviembre y era Octubre....el 31 para ser exacto. Así es: Halloween. En aquellos tiempos lejanos esta fecha podría resultar bastante significativa, sobre todo para mí. Las mujeres de la promoción hacían reuniones (a las cuales nunca me invitaban) y fiestas (a las que invitaban a toda la promoción) y yo (habiendo adelgazado unos 5 kilos y siendo flaco y con un autoestima más alto) asistía con todo el gusto del mundo. Cuando digo que antes era un poco gordo quiero decir no que era rellenito, sino gordo...aún recuerdo mi hermana cantándome: "Ayudín, ayudín, a la grasa le pone fin". En fin...
Esta fiesta de Halloween fue todo un evento, en una casa muy bonita en Miraflores que tenía piscina. Mi disfraz fue uno muy poco creativo, en esa época yo escuchaba mucho punk, asistía a conciertos en barranco y pogueaba con gente mayor q me tumbaba al piso....Me disfracé de punk. Recuerdo que fui con mi padre a comprar el spray para tener el pelo rojo por un par de días y luego al dejarme en la fiesta me dió su celular y me dijo te llamo a la hora que pase a recogerte. Bacán.
Entrando a la fiesta me encuentro con mis amigos y todos estaban disfrazados igual que yo pero con un color de pelo diferente. Un amigo, José Antonio, me dijo: "Oye por favor, jálame a mi casa que no tengo como regresarme"....Bacán.
Ahora.....¿Qué sucedió? De una u otra manera me encontraba hablando con unos amigos que de broma me comenzaron a empujar hacia la piscina, bueno.... la broma no les funcionó muy bien (o tal vez demasiado bien) y caía a la piscina........ Recuerdo estar debajo del agua y ver como toda esta se ponía roja por el tinte que llevaba y pensar: "bueno, salgo de la piscina y me mato de risa", pues realmente no me molestaba tanto haberme caído. Salí de la piscina y comence a bromear con mis amigos (¿amigos?) y tratar de empujarlos a la piscina cuando recordé: Tengo el celular de mi papá y ahora está malogrado y está comenzando su negocio y ahora nadie lo va a poder llamar. Mi padre es una persona muy alegre pero si se molesta no hay quien lo pare.
Lloré, al frente de toda mi promoción lloré. Nadie entendía por qué, de la nada había cambiado risas por lágrimas. Luego de explicarles a todos entre alaridos fueron muy buenos, me dieron ropa, una secadora, y abrazos. Pero el daño estaba hecho.
Lo peor fue cuando me recogió mi padre y José Antonio tuvo que escuchar todo el grito de su parte y responder de vez en cuando preguntas como: "¿Tu también eres tan imbécil?". No estoy bromendo, esa fue la vez que mi padre me ha odiado más que nunca, lo veía en sus ojos.
Bueno, el punto es que ahora siempre que hay una piscina en una reunión o fiesta escucho comentarios como: "¡Ignacio cuidado!" y lo tengo, no camino cerca a ellas por nada. La moraleja es: Nunca está de más ser precavido.

¿Sala 1?

La siguiente anécdota sucedió en el cine, hace un par de meses. Estaba con mi enamorada y decidimos ir a ver la película más comentada del momento, “Batman El Caballero de la Noche”. Compramos las entradas, los bocaditos y fuimos a la sala. La puerta estaba cerrada, la abrimos y vemos que todos los asientos estaban llenos y la película ya había empezado (no nos extrañamos porque habíamos llegado un poco tarde). Mientras buscábamos asientos, se podía ver la cara de las demás personas extrañadas -supongo que estaban así porque se estaban burlando que no encontrábamos asientos juntos- y solo encontramos en primera fila, donde tienes que ver con la cabeza levantada y no ves casi nada (y esta película SÍ que la quería ver). Nos sentamos y la gente seguía mirándonos de rato en rato extrañados, pero no le dimos importancia. Comienzo a observar y no entendía nada de la película, pero supuse que como ya había comenzado muchas cosas habían sucedido, así que seguí mirando. Pero luego de un rato me pareció rara una escena, una chica gritando en un sótano o algo por el estilo, Le dije a mi enamorada y me comento lo mismo, tenía la misma impresión. Es así que me dijo que pregunte a la persona del lado si era la película, pero yo de terco le dije que era por las puras. Luego que me insistió un rato, le pregunto: “Brother esta es Batman, ¿no?” a lo que me responde: “No, te has confundido”. Estábamos en otra sala!!!! Era esa la razón por la que todos nos miraban raro, la película esa tenia como 1 hora de comenzada. Bueno eso fue lo que sucedió y mi consejo es que mires bien la sala que te toca, no trates de saber donde está.

Fichitas de ajedrez...

Este ‘roche’ ocurrió el ciclo pasado a principios cuando esta en mis ‘huecos’ (tiempo libre que se tiene entre una clase y otra). Un día saliendo de mi clase me encuentro con un amigo y me dice para pedirle al Centro Federado que nos preste las fichas de ajedrez para jugar, como no tenia nada que leer o importante que hacer le dije que si, al llegar al Centro Federado pedimos las fichas de ajedrez las cuales nos dieron las fichas en un envase ,no nos percatamos que este tenia la tapa rota, empezamos a caminar por la rotonda de Letras( a las 12 A.m. hora en la cual las personas salen de clases) cuando quiero amarrarme en cabello y le doy el envase de las fichas de ajedrez, sin darme cuenta, de cabeza, en ese momento todas las fichas de ajedrez cayeron al suelo causando un ruido increíble (como si rompieran una ventana) , con el que todas las personas que estaban en la rotonda voltearon a mirar y sin darnos cuenta las personas salían de sus salones para observar el espectáculo y todo esto acabo con todas las personas de EE.GG.LL. aplaudiendo nuestro vergonzoso accidente.

En el piso...

Esta anécdota es muy vergonzosa para mí que fui la que lo viví. Mi ex enamorado me invitó a su fiesta de promo. En ese tiempo quería impresionarlo porque me había dado cuenta que me seguía gustando. Es por eso que ese día me esforcé más en arreglarme, en ponerme un vestido muy lindo, quería que todo sea perfecto para que cuando me viera se impresionara. Llegó a recogerme y cuando llegamos a la fiesta como toda fiesta de promo tenía su ceremonia. Pasado eso, recién empieza la fiesta. Estábamos en una mesa con sus mejores amigos y sus parejas. Lamentablemente para mi suerte yo no los conocía así que no me sentía mucho en confianza. En un momento salimos todos a bailar y cuando regresamos a la mesa me senté en mi silla pero esta término en el piso conmigo y mi vestido, patas arriba, es decir se me vio todo. En ese momento me di cuenta que todos sus amigos y sus parejas estaban que se mataban de la risa y yo la más “arrochada”, como nadie me ayudaba, me arme de valor levante mi silla y me volví a sentar. En ese momento me volví a caer de la misma manera y me di cuenta que no eran sus amigos de la mesa los únicos que se estaban riendo de mi incidente, sino también los de las otras mesas. Yo estaba que me moría de la vergüenza, en sima que no conocía a nadie Hice el roche de mi vida dos veces. Mi ex en ves de ayudarme también estaba que se mataba de la risa, pero cuando se dio cuenta que a mi no me daba mucha gracia levantó la silla y se dio cuenta que la pata de esta estaba rota. Lo único que me faltaba era que digan que yo la rompí por mi peso. Yo quería regresarme a mi casa de tanto roche que tenía. No sabía en donde meterme. Sin embargo sus amigos fueron muy buenos y después de reírse me empezaron a darme apoyo moral. A pesar de todo, mi ex me ayudo a divertirme mucho esa noche. Aunque no haya tenido un buen comenzó no terminó mal la fiesta.

Moraleja: Antes de sentarte en cualquier silla fíjate bien si esta no se va a caer. Así mismo, si te caes en la vida levántate, que no eres al único que le ha pasado eso. “ESTÁ PERMITIDO CAERSE PERO LEVANTARSE ES OBLIGATORIO.”

El barristaa valienteee !!....??

Pasó en febrero de este año, la U jugaba con la San Martin en el estadio monumental y bueno, mi papá como es socio tenia entradas gratis y a mí, como no tenía nada más interesante que hacer ese día, me convenció de ir junto con mi hermana también, que por cierto, es RECONTRA hincha de la U al igual que mi papá. Llegamos al estadio empezando el partido, fuimos a occidente (que es la parte más “tranquila” del estadio porque no hay barra brava) y nos sentamos a verlo junto con los demás hinchas de la U que estaban en ese lado. La gente (incluyendo a mi papa y a mi hermana) empezó a hacer un poco de barra, le gritaban al árbitro, a los jugadores, ya saben, como en un partido común y corriente, pero obviamente apoyando a la U. De la nada, se empezó a escuchar una mínima barra a la San Martin, y digo mínima porque a la hora de voltear para ver quién era el valiente- o el tarado?- que estaba apoyando al otro equipo en medio de una multitud de hinchas de la U, me di cuenta que solo era UNA persona: era un chico que estaba con su enamorada y estaban sentados a unos tres asientos más o menos que nosotros. Toda la gente de alrededor empezó a murmurar y a gritar “este broder está loco!”, “que hace acá, ahorita lo boto” “LARGATE OEE!” y cosas por el estilo, pero como justo nosotros estábamos a su costado era como que solo lo veíamos con cara de “que haces acá ¬¬”. Estuvo así todo el tiempo, haciéndole barra a la San Martin e insultando a los jugadores de la U mientras todo el mundo a su alrededor se aguantaba las ganas de reventarlo literalmente. Hasta que de repente, faltando 2 minutos para que acabara el partido, la San Martin metió gol y al instante se escuchó un “GOOOOOOOOOOOOOLLLLL!!!!!” y palmas y gritos que venían de este chico “valiente”, inclusive se paró, se subió en el asiento y empezó a insultar al arquero de la U. Yo en ese momento pensé “pobre hombre….ahorita lo revientan”, porque todo el mundo, junto con mi papá y mi hermana, estaban con una cara de asadasos y piconasos por lo que había pasado, y más que nada, por la celebración que había hecho este chico, la cual obviamente estaba fuera de lugar. De repente, cuando ya todos estaban resignados a perder, después de unos segundos de que la San Martin metiera gol y en la última jugada, la U empató y acabó el partido. Entonces, fue un momento de locura total, se escuchó un ” GOOOOOOOOOOLLL!!!!!!!” y todos se quería avalanchar hacia el pobre chico que estaba con una cara de palteadaso; fue tanto la celebración que mi hermana, que estaba saltando, me empujó al costado de este chico y no sé como salí volando enfrente de todo el mundo y acabe tirada en el piso por sus pies. Cuando logré levantarme de la desgracia en la que estaba, vi a un loco gritándole en su cara “GANAAAMOSSSS!! GANAAAAMOSS!! CSM!!”y refregándole la camiseta de la U en su cara, era mi querido padre el que estaba haciendo eso junto con mas personas que estaban a su alrededor gritándole que habían ganado, pero obviamente de una forma mucho más vulgar!. Al final, el pobre se fue completamente humillado y arrochado por todo el mundo mientras la gente seguía gritándole de todo. Desde esa vez, ahora voy más seguido al estadio porque aunque no lo crean, es un lugar muy chistoso, al menos para mí! =P

Un lindo ratoncitoo

Recuerdo que estaba en 1ero de secundaria, y había una profesora de esas que no le caen a nadie, pero cuando ya no te enseña, la extrañas. Esa profesora era la Miss Tarcila, algo que la caracterizaba eran los gigantes “chancabuques” (dicése de los zapatos con plataforma, que aumentan entre 5 a 10 centímetros.) Bueno un grupo de chicas de mi promoción decidieron hacerle una jugarreta a la Miss Tarci, la cual consistía en soltar un lindo ratoncito en su hora de clase.

Llegó el día jueves, teníamos clase de Historia (curso que dictaba maliciosamente la miss Tarci), pero las dos horas anteriores teníamos Educación Artística con la buena y paciente Miss Miriam (sufría un problema en la cadera, así que tenía que usar muletas). Es así, que muy temprano en la mañana llegó Caro con el pequeño y adorable ratoncito comprado en el mercado de Magdalena.

Mientras que la Miss Miriam daba las indicaciones para el trabajo que haríamos en clase, el escabullidazo ratón asomo sus narices por la cajita en la que estaba, y salió. Corrió por todo el salón y la pobre miss Miriam salió disparada por la puerta. Ahora, imagínense como corrió y los gritos desaforados que dio. Obviamente, recibimos demerito todo el salón y nuestra jugarreta no salió como esperábamos.

Un rotundo no

Hoy toca contar una historia de la que tal vez no esté muy orgulloso. Nuevamente el protagonista soy yo, pero no yo ahora, sino un pequeño niño de 10 años, creo. Estaba en 4to de primaria (¿10 años?Un año genial, recuerda que hasta 1ro de secundaria recordaba: "todo debería ser como en 4to, ese fue un gran año". Quizá lo fue por los trabajos tan divertidos que nos dejaban los profesores como imaginar que nos quedamos de náufragos en una isla con un grupo de amigos, todo era imaginación y kamehamehas, también hay que recordar que era la época del álbum de figuritas de pókemon el cual era genial.

En este ilustre año los recreos destacaron sobre todos los recreos que he tenido en mi vida. Con la imaginación de un grupo de niños de 10 años que se rehusaban a jugar fútbol creamos algunos juegos buenísimos. Entre ellos destacaban el que teníamos que salvar a alguien de un alien que lo jalaba desde debajo del tobogán. A pesar de contar con un arsenal de juegos creativos no se podían olvidar los clásicos: chapadas, policías y ladrones, 7 pecados, pinta nosecuántos....y cláro, escondidas.

En este último es donde ocurre la perversión infantil, lo cual suena mucho peor de lo que es en verdad..... Me tocaba esconderme y comencé a correr cuando de la nada una chica de mi clase me dice: "Me gustas mucho, ¿Quieres estar conmigo?"....Pobre chica, en ese entonces era muy fea y yo muy superficial, sólo opté por decirle con cara de indignación : " ¡No! Tu eres horrible", y corrí a esconderme.

Hasta el día de hoy pienso en ella y cada vez que una chica me ha dicho no he mirado al cielo y pensado:"maldito karma...."

Vestido impúdico....!

Quinos: fiesta en la cual se celebran los 15 años de una chica y se hace una fiesta con los amigos de esta por diversión. ¿Por que definir esta palabra? Porque lo que me sucedió no fue algo divertido…
Hace un poco más de un año me fui a un quinceañero con una amiga y dos amigos, de colados. Pasada la fiesta, mi amiga me pide que la acompañe al baño, yo no quería ir, pero la acompañe y me senté a esperarla. Al salir del baño me senté en la mesa que estaba con mis amigos, y un chico me saco a bailar, salimos y sentía que toda la gente me miraba, bailamos por 20 minutos aproximadamente,. y un grupo de 7 chicos se pusieron detrás de mí mientras bailaba, cuando vuelvo a mi mesa mi amigo me dice que me pare y le dije que no y empieza a hablar con mi otro amigo, y los dos me piden que me pare y me voltee, lo hice, cuando veo la cara de asombro de mi amigo que me dice que me acomode el vestido y ¿Qué había pasado? Que la parte trasera de mi vestido se había metido en mi ropa interior y había estado bailando todo el rato así y todas las personas de la fiesta me miraban U_U!...una anécdota muy rocosa que me paso y que no quería recordar hasta el día de hoy =D!

ToCaDa dErEcHa

Este es uno de los roches de los cuales es difícil olvidar…
Un día caminando por la facultad de derecho de la PUCP mi amiga vio a un chico que le gusto mucho y me insistía todos los días para ir a esta facu a verlo. Un día, de los tantos que íbamos a derecho, lo vimos bajando las escaleras mi amiga se emocionó y quiso seguirlo para ver a que salón se dirigía y poder saber su horario, al seguirlo por las escaleras quise hacer algo para el pueda verla y así empezar una conversación, entonces se me ocurrió empujarla, al empujarla sus manos cayeron precisamente sobre las nalgas del chico causando que este volteara a mirarla y ella quedo muy avergonzada y desde ese día, mi amiga, no quiere ni siquiera pasara por esta facu.
Moraleja: si quieres ayudar a una amiga con un chico trata de no empujarla para llamar la atención de este…pues puedes causar un pequeño ‘roche’ como este…

"Scooter borracho"

Cuando ingresé a la universidad, era una de esas chicas que se atreven a todo. Me emocioné mucho con la idea de las “cachimbadas” (juegos para los nuevos de la facultad), es por eso que el día de la gymkhana acepté jugar el “scooter borracho”, el cual prácticamente era solo para hombres. Este juego se trata de montar el scooter a toda velocidad hacia cuatro estaciones, donde en cada una se toma 3 shots de ron y se dan 5 vueltas. Quien termine más rápido las estaciones es el ganador. Yo había llevado el scooter de mi primo. Lamentablemente yo era la única que podía montarlo ya que estaba un poco chueco y además no fueron muchos hombres de mi salón y los que fueron no se atrevían a jugar o no sabían montar scooter. Éramos 22 pero se dividieron en grupos de 4 para competir, los participantes todos eran hombres y yo era la única mujer. Algunos participantes me felicitaron por tener el valor de jugar y pensaban que yo era una de esas chicas que tenían “aguante” con el trago. En esos momentos lo único que me importaba era ganar, nunca pensé en el trago y lo que me podía hacer. Mis amigas decían que estaba loca e inclusive una quiso hacer el reto por mí.
Cuando comenzó la carrera, fui a la primera posta, el ron sabia a alcohol etílico (me dijeron que era Cartavio), di mis 5 vueltas rápido y fui la primera en salir. Estaba en primer lugar hasta la tercera posta, cuando se me calló un vaso de ron y me hicieron repetir los tragos, eso me retrasó un poco dejándome en el segundo lugar. En ese momento estaba toda mojada de ron hasta mis manos, pero mientras corría a la última posta mis manos mojadas y el scooter chueco me hicieron caer, retrasándome más. Terminé la carrera en cuarto lugar oliendo a puro ron. Mis amigas me ayudaron a cambiarme. Hasta ese momento estaba lúcida. Sin embargo, después de dos minutos el ron se me subió a la cabeza, es decir estaba borracha. Yo una chica tranquila que nunca tomaba, salida de un colegio de monjas con unos padres conservadores estaba borracha. Solo me acuerdo de los 5 minutos siguientes, ya que después perdí la conciencia. Mis amigas me contaron que bauticé todos los patos de la universidad, que hable tonterías, llore, reí, eructe, y me quedé dormida. Cuando me desperté al día siguiente no estaba en mi casa sino en la de una amiga porque si mi papá me veía así de mal iba a estar castigada por el resto de mi vida. Me enteré todo lo que había hecho y que todo el mundo me vio y no solo eso, si no también que eliminaron el concurso por causa de que una chica se emborrachó, es decir “yo”. La vergüenza que me dio fue enorme ya no quería ir clases, sin embargo, para mi salón fue toda una hazaña.

Moraleja: Si no tomas trago, y de un momento a otro se te ocurre tomar mucho vas a terminar borracha y vomitando. Piensa bien antes de actuar.

Mi pequeñooo "chonguito" ... U.u

Bueno esto me pasó cuando todavía estaba en el cole, estaba recién empezando 4to de secc. y justo un amigo muy cercano cumplía 15 años, entonces mis amigas y yo planeamos hacerle tipo un quinceañero en mi salón, inclusive lo hicimos bajar las escaleras cantando la canción “quinceañera” y nosotras éramos las supuestas “rositas”. Ya sé que suena raro hacerle todo esto a un chico pero era un amigo recontra cercano a nosotras y sabía que todo era por hacer chongo pues! Entonces, llego la hora de recreo grande y obviamente en todo quinceañero tiene que haber torta, por eso mis amigas y yo le compramos un pie de limón pequeño para cantarle feliz cumpleaños y de paso también tirarle un poco en la cara junto con talco, cocoa y demás cosas que habíamos traído anticipadamente como parte de nuestro pequeño chonguito (que al final se convirtió en chongasoo ¬¬) Después de comprarlo, lo llevamos al salón para cantarle con mis demás amigas, de ahí lo rodeamos y empezamos; estábamos en medio del “cumpleaños felizzz te deseamos a tiii…” y de repente el pie se estrello en su cara con talco y cocoa que nosotras teníamos caletamente escondidos. Apenas lo hicimos, salimos corriendo y gritando riéndonos porque había acabado totalmente blanco por todo el talco que le habíamos echado (nos acabamos la mitad de la botella grande), era como que todo su pelo estaba blanco y apenas lo tocabas y una nube blanca lo rodeaba, agregando el pie de limón en su cara era demasiado gracioso como para dejar de verlo. Creo que fue por eso que al minuto todo mi salón estaba rodeado de un montón de gente, incluyendo también la subdirectora y más profesoras. El resultado de nuestro chonguito fue que a mí y a mis amigas, que éramos masomenos 15, nos suspendieron dos días y encima llamaron a nuestros papas escandalizados por “la fechoría que le habíamos hecho al pobre” (citándolo exactamente, todavía me acuerdo u.u ). Fácil pensaran que él se molesto con nosotras de por vida por lo que le hicimos (porque en verdad si reconozco que nos pasamos un poco) pero fue al contrario, el lo tomo como una broma y no se molesto con nosotras para nada, pero eso sí, se encargo de vengarse de cada una de nosotras en nuestros cumpleaños, aunque eso ya es otra historia!

Cosas que pasan...

Érase una vez… una púber provinciana recién llegadita a la capital. Esta jovencita (que apodaremos X) de unos 13 años, coqueta y risueña, se enamoró perdidamente de un chico un par de años mayor (Nótese los siguientes datos: todo “churro”… con esa estructura ósea varonil que excita a las muchachitas con las hormonas revueltas). X siempre lo veía en los recreos, le hacía ojitos ,y de vez en cuando, un bailecito coquetón “caleta” (como se diría coloquialmente).

Ella ya sentaba por hecho que tendría en algún momento de sus largos y a la vez tan fugaces años, algún encuentro del tercer tipo con este muchachito de la estructura ósea excitante. Sin embargo… Un día, en la clase de Educación. Física, su velluda profesora (tenía la costumbre de depilarse o afeitarse las axilas muy esporádicamente.), la mandó a correr 15 largos minutos alrededor del colegio junto con sus compañeros. De pronto, cuando iba por la vuelta 5 o 6, vio al muchachito churro salir de su salón. Entonces para cruzarse con él corrió más y más rápido y resbaló, como Scrat resbalando por el hielo en búsqueda de su preciada y churra bellota (Bellota = churro), y cayó de bruces en los pies del mozuelo… NUNCA más volvió a ver su atractivo rostro, ya que ella salía despavorida cuando lo veía venir… COLORÍN COLORADO ESTA ANÉCDOTA SE HA TERMINADO.

Pequeña anécdota de la infancia

Todos aquellos que hemos pasado por la costa verde cerca al club regatas durante un caluroso día de verano hemos visto esos pequeños botes a vela navegar a lo lejos en grupo, esos son los "optmists". ¿Qué tienen que ver con esta historia? Mucho.

Cuando era menor, una inocente criatura de Dios que rondaba la playa y tiraba kamehamehas para ahuyentar a sus enemigos, mi madre me obligaba a llevar al menos 2 deportes durante el verano, los cuales yo podia elegir. Siempre cambiaba de deportes, por lo cual ahora sé un poco de esgrima, basketball, windsurf, surf, remo, entre otros...Hay muchas anécdotas entre estos años tan divertidos, pero la primera que viene a la mente es la del Optimist, ¡qué deporte!

El optimist es una disciplina bien divertida pero a la vez un poco complicada hay q estar al tanto de la dirección del viento, del timón, de la vela, los nudos de viento, las olas, entre otras cosas.... Como ya se imaginarán yo era un niño de apenas 10 años en su primera clase tratando de impresionar a las "flakitas" gringas del regatas(en esa edad en verdad todas eran flaquitas) y mi hermana, que también se había matriculado, no paraba de molestarme.

Me subí al optimist y un zodiak(lancha) lleno de alumnas me seguía de cerca, el profesor dándome instrucciones. Sin previo aviso...una ráfaga de viento....puffff al agua. La vela cayó encima mío y no encotraba salida, me desesperaba y se acababa el oxígeno, ¡CLACK! como método de sobrevivencia de último segundo golpeé la vela con mi puño y mi cabeza salió por el medio de esta a la superficie donde me esperaban las risas de las regias chibolitas. El roche no terminó ahí pues mi hermana tuvo la genial idea de decir: "pero si parece un osito cariñosito" y ese maldito apodo se me quedó pegado como chicle al pelo todo el verano y su protagonista no tuvo ni rose con ninguna chiquita. ¡Gracias hermana!

Mi papá samaqueando a la subdirectora de mi colegio

Esto pasó hace ya mucho tiempo. Estaba en quinto de secundaria, en la última kermesse escolar que iba a pasar. Mi papá es el protagonista de esta anécdota. Él estaba melancólico porque se estaba despidiendo de un colegio que vio crecer a sus tres hijas por eso se puso a beber con sus amigos de la promo. Mientras que yo en ese momento estaba con mis amigas disfrutando de la orquesta que estaba tocando en el escenario. La orquesta en un momento paro de tocar para cantarle el happy birthday (cumpleaños) a la subdirectora de mi colegio la hermana o monjita Aurora. Fue en ese momento que ví un mancha roja que se subía por adelante del escenario. Era mi papá borracho que se subió a festejar a la cumpleañera. Todo estaba bien hasta que empezaron a tocar la canción del "culiquitaca" ya que la pobre hermanita fue samaqueada por mi papá en su intento de bailar con ella. Todo esto se puede ver en el video pero lo que no se ve en el video fue que luego unos policías fueron a bajar a mi papá del escenario. Esto para mi me dio mucha risa pero mi mamá por el contrario se enojo mucho y se moría de la vergüenza. jajaja. Lo más chistoso es que al día siguiente mi papá no se acordaba de nada.

El más rápido del mundo

Macarena en Derecho

Bienvenidos a Grupo Sin Verguenzas

Hola, a todos nuestros visitantes...Este es un proyecto fresco que seis estudiantes se han planteado a sacarlo adelante.Sin vergüenzas es un blog creado para usted... siii para usted señor, señora, joven, jovencita lector(a) que me esta leyendo en este momento (y se que no va a cambiar de página). Este es un sitio de entretenimiento para que se ria, se divierta y comente todas las anecdotas que podamos contarle y mostrarle y quiza hasta aprenda algo de ellas y nos pueda contar las suyas. Nuestra misión aquí es poder sacarlo de los problemas que pueda tener y hacerselos olvidar un poco, riendose de las diversas situaciones vergonzosas que le han pasado a personas como usted.
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